Las construcciones que realizamos son piezas temporales, efímeras, únicas e irrepetibles. Generalmente son obras de gran formato, desarrolladas en vinculación con el entorno, con los elementos y los ciclos de la naturaleza. Constituyen el núcleo de acciones performáticas en las que interactúan los diferentes lenguajes artísticos.
Los proyectos son pensados para y abiertos a la participación de las comunidades donde se realizan, y de allí suelen provenir los diversos materiales con los que se trabaja, en su mayoría recuperados. El proceso de construcción es diferente en cada oportunidad, y puede durar una sola jornada o extenderse varios meses.